una mentada para tener paz

Hoy es un día tan lleno de actividades físicas que la mente imparable me lleva de un lugar a otro, el tema es que ya terminé lo planeado para hoy pero mi mente no se ha enterado; ella sigue a toda velocidad haciendo planes, generando ideas, gritando que siga avanzando. 

ALTOOOOOOOOO!!!

La mente necesita un descanso, una pausa de paz para crear historias, futuros diferentes. El tema es que no sabe cómo descansar, la mente no sabe parar, es necesario aprender a hacerlo.

Una mente descansada es una mente creativa y enfocada; y eso es justo lo que queremos para tener salud mental que bien sabemos influye en nuestra salud emocional y nuestra salud física.

¿Qué hacemos?

 Te voy a recomendar tener aceite esencial (de cualquier marca) olor a menta, puedes improvisar con un té de menta para olerlo y tomarlo, o con unas hojas de menta machacadas.

 La menta es una planta estimulante para la mente, aparte de su delicioso aroma y picante sabor.

 Ahora sí, con los ojos cerrados inhala y exhala el olor a menta, pon unas gotas en tus dedos índices y da un ligero masaje en las sienes en ambos lados (cuidado con los ojos), solo respira en tres tiempos.

 Cuenta 1-2-3 al inhalar y al exhalar. Al contar tu mente se desenfoca del tren de pensamientos para enfocarse en el conteo que al ser rítmico relaja a la mente.

 Si puedes y te hace bien, toma unas gotas en agua, o un té, o un frappe con limón y menta. Cualquier opción que te invite a disfrutar la menta. El enfoque aquí está en disfrutar ese tiempo que te estás dando para ti para tomar la menta.

 Ahora cerramos con broche de oro, toma una pequeña toalla y sumérgela en agua con hielos y unas gotas de menta, exprímela y ubícala en tu frente por unos minutos.

 LISTO!!!!

 Tu mente está en paz.

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