Eres una página en blanco
Desde pequeña, muy pequeña, tal vez siete años comencé a escribir en mi diario y fue para mi un medio de expresión fascinante.
Mi desarrollo y crecimiento fue en una familia donde nunca me sentí perteneciente, y mi vida era tan monótona y aburrida, que un día era una repetición exacta del anterior (supongo que de ahí viene mi obsesión para aprender la lección y dejar de repetirla).
A los 13 años en la escuela nos dejaron leer un libro de tema opcional y ahí comenzó mi historia de amor con la lectura, no pude soltarlo de principio a fin, abriéndome las puertas a un mundo con realidades en su mayoría extraordinarias y muy diferentes de la mía.
Con el pack completo escritura y lectura desarrolle la habilidad de transitar dos realidades, una que habitaba en mi cabeza en mis fantasías, en mi diario y otra en mi realidad.
Ahí comencé sin saber a manifestar en mi realidad situaciones, personas, cosas que habitaban en mis fantasías que ahora entiendo que eran visualizaciones.
Y el trascurrir de mis monótonos y aburridos días cambio, escribiendo mucho, reflexionando mucho, cuestionándome la mayoría de las veces sin respuesta las incongruencias que no comprendía del mundo de los adultos.
Mi mundo secreto era tan importante para mi, que desarrolle con símbolos un alfabeto que sólo yo conozco y que el hábito de escribir de forma segura tan sólo para mi, se mantiene al día de hoy; de forma infantil sigo escribiendo con símbolos todos mis diarios y son tan rápida al usarlo que estoy segura te sorprenderías al verme escribir así.
Escribir para liberar.
Sin embargo, hay días, muchos días, en que mi mente está en blanco, días como hoy que quiero compartir mi blog contigo y mi mente está en blanco, nada que escribir.
El síndrome de la página en blanco.
El gran terror de los escritores, ver frente a mi la pantalla en blanco sin más que escribir.
Es justo ahí donde entra el corazón a compartir, suelto el control de la mente y fluyo con la emoción y el consejo del corazón.
Me acosté pensando, mañana es día de enviar el enlace al blog y estoy en blanco.
Al despertar mis guías me dieron la respuesta: “Si tan solo entendieras que todos los días son una pagina en blanco”.
Wooow!! Así es, todos los días se nos da la oportunidad de escribir nuestra realidad en esa hermosa página en blanco frente a nosotras, y es nuestra decisión escribir nuestra realidad desde la mente que no sabe crear nada nuevo o ir al amor, al corazón para escribir nuestra página en blanco del día creando una nueva realidad.
La invitación hoy es a que escribamos juntas nuestras historias desde el corazón creando para todos un mundo mejor.
Muchas gracias por leer mi reflexión, honro y aprecio tu tiempo y presencia en este y todos mis espacios.